Baja California 1 de agosto de 2017 (GT).- El mentir es una acción común que goza de la aceptación y uso por parte de la mayoría de los ciudadanos, siendo importante considerar que una mentira es una declaración falsa que se dice esperando que los oyentes la crean para ocultar la realidad en forma parcial o total. Ante ello, en esta ocasión la casa encuestadora IMERK Opinion & Market Intelligence se enfocó en conocer los hábitos de los habitantes de Baja California con relación al uso de mentiras en su vida cotidiana.
Aceptan y justifican el uso de mentiras.
Manuel Lugo Gómez, director de la casa encuestadora mencionó que resulta interesante ver que el 62.8% de las personas consideran que los hombres mienten con mayor frecuencia, sentir que sube a 67.6% en la opinion de las mujeres y baja a 48.7% entre los hombres, sin embargo hay que resaltar que ellos mismos aceptan que su género es el más mentiroso.
El 71% de los bajacalifornianos consideran que hay momentos o motivos importantes que justifican el decir alguna mentira, la aprobación de su uso es mayor en Tijuana y Rosarito (73.3% ambas), así como en las mujeres (72.2%) y los jóvenes de 18-25 años (78.7%).
Refirió que de acuerdo a lo antes mencionado las mentiras son aceptadas por la mayoría, y que el porcentaje de a quién se le miente, resultó en lo siguiente:
– UN FAMILIAR: el 77.8% afirma haberle mentido a un familiar, siendo mayor en Tecate y Rosarito (80.8% ambos), así como en los hombres (80.7%) y las personas de 18-25 años (87.2%)/26-35 años (89.2%).
– UNA AMISTAD: el 73.3% le ha mentido a sus amigos, subiendo en Ensenada y Rosarito (75.0% ambos), así como en los hombres (76.7%) y las personas de 26-35 años (84.3%).
– SU PAREJA: el 58.2% le ha mentido a su pareja, principalmente en Rosarito (67.5%) y subiendo considerablemente en las personas de 26-35 años (80.4%), cabe señalar que se mantiene una tendencia similar entre mujeres y hombres.
– AL JEFE: el 31.7% le ha mentido a su jefe en el trabajo, siendo mayor en Ensenada (37.5%), así como en los hombres (39.3%) y las personas de 36-45 años (41.3%).
– COBRADOR: el 30.8% le ha mentido a un cobrador, aumentando en Mexicali (38.3%), así como en los hombres (38.7%) y los jóvenes de 18-25 años (40.4%).
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El 49.8% de las personas, añadió, consideran que es aceptable decir una mentira cuando se trata de guardar el secreto de una persona, el 15.8% para evitar perder algo, el 12% para cuidar su imagen y el 8% para no afectar su relación con otra personas, solamente el 5.2% opina que ninguna situación justifica el uso de las mentiras.
En los últimos siete días el 14.2% acepta haber dicho alguna mentira, índice que sube en Rosarito (15.8%) y Mexicali (15.0%), así como en los hombres (20.7%) y los jóvenes de 18-25 años (36.2%). De ellos, la mentira más reciente fue dicha a un amigo (31.8%), a sus padres (22.4%), a la pareja (17.6%), a sus hijos (10.6%), a un compañero de trabajo (8.2%), a un vendedor/cobrador (8.2%) y a un familiar (1.2%)., comentó.
¿Mentiras piadosas o verdades hirientes?
Considerando que una mentira piadosa se toma como aquella afirmación falsa realizada con una intención benevolente que puede tener como objetivo el tratar de hacer más digerible una verdad tratando de causar el menor daño posible al evitar fricciones innecesarias, secuelas o actitudes que pueden ser desagradables para alguien, se encontró que el 53.2% de las personas afirman que sí pueden ser dichas cuando hay un buen motivo, sin embargo el 46.8% opina que no se deben decir ante ningún motivo, resultando interesante conocer que la aprobación del uso de las mismas es mayor en Rosarito (60.8%), así como en las mujeres (54.9%) y las personas de 46-65 años (57.9%).
“Cabe resaltar que el 79.3% dice preferir una verdad hiriente que una mentira piadosa (20.7%), subiendo lo primero en Tijuana (88.3%), las mujeres (81.3%) y las personas de 26-35 años (83.3%)”, declaró.