Tijuana, B. C., 9 de octubre de 2016 (GT).- La sustentabilidad es un horizonte que requiere superar los periodos de gobierno con una visión de largo plazo y una administración pública profesional que no esté sujeta al vaivén de los intereses políticos electorales, pero también urge más educación ambiental para lograr una sociedad empoderada y más participativa.
Así lo remarcó José Carmelo Zavala Álvarez, director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental (CIGA), quien destacó que hoy se precisa de funcionarios con un perfil altamente profesional, por lo que exhortó a que los nuevos gobiernos municipales que asumirán el poder en diciembre se integren anteponiendo este perfil y no el arraigo partidista.
“Más educación ambiental puede conducir a más participación social, siempre y cuando la sociedad perciba una verdadera política y políticos al servicio de la comunidad, un mejor desempeño de los gobiernos, con más transparencia y rendición de cuentas, porque la sustentabilidad es un horizonte que debe trascender los cambios de gobierno”, expresó.
Recordó que hace unos años, el estudio “Green at fifteen”, mejor conocido como PISA 2006, elaborado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), reveló que el 64.8% de los estudiantes mexicanos recibían información sobre educación ambiental en el salón de clases, mientras un 39.8% provenía de los medios de comunicación, cerca del 20% de amigos y menos del 10% de libros e internet.
“La educación es un indicador de desarrollo y movilidad social; hoy el grado de educación está en sexto de primaria y hay un 15% de analfabetismo, entendido como no saber leer ni escribir, pero el analfabetismo funcional puede estar entre el 25 y el 30%; si trasladamos esto al tema ambiental, podríamos decir que la educación ambiental apenas tiene poco más de una década incorporada formalmente en los programas oficiales”, consideró.
Hay cada vez más conciencia de los problemas ambientales, opinó Zavala Álvarez, sobre todo en temas como la escasez del agua, el ahorro de energía, el manejo de los desechos, la deforestación y la contaminación del aire, pero se requiere un nuevo impulso, porque con educación ambiental las conductas individuales se vuelven organización colectiva.
“Cada que enfrentamos un reto gigantesco, pensamos que es cosa de educación y vemos esto como una fatalidad y tan lejana solución que para qué iniciarla, por eso ante los retos que obligan a respuestas rápidas, pero nos tropezamos con las ramas de los árboles sin ver el bosque, porque la urgencia nos obliga a resultados inmediatos y por eso cada gobierno vuelve a empezar, por no pensar en acciones a largo plazo”, afirmó.
Estamos en permanente crisis, comentó el director del CIGA, y seguimos gastando, pero los resultados no son sostenibles, sino volátiles y frágiles, se agotan en su propia inmediatez; una nueva cultura obliga a la sustentabilidad en todas las áreas de la actividad humana, individual y colectiva, retomando el conocimiento de las comunidades y pueblos originarios.
“Separar, sin poder reintegrar, nos da una visión incompleta que nos lleva repetidamente a actuar aislados, sin efectividad; en el tema de seguridad, por ejemplo, se comete el error de atacar las consecuencias y no buscar sus raíces, pero la educación es la respuesta y la cultura es lo permanente, imaginemos la ciudad que queremos en 20 o 30 años y pongamos un ladrillo a la vez, con aumentos mínimos diarios en la dirección correcta”, dijo.
José Carmelo Zavala Álvarez afirmó que construir una seguridad sostenible solo es posible como resultado de una salud comunitaria, de reconstruir un tejido social sano, sin hambre, sin pobreza, con más oportunidades, más justicia y más equidad, puesto que solo así la seguridad será duradera.
Finalmente, recordó que algunas recomendaciones en el ámbito doméstico son no desperdiciar el agua, realizando baños de corta duración y cerrando la llave para que no corra el agua innecesariamente; igualmente, dividir la basura en orgánica e inorgánica, separando los residuos de papel para mantenerlos limpios y facilitar su reciclaje.
Asimismo, el director del CIGA invitó a la ciudadanía a comprar solo lo que va a consumir, para así evitar el desperdicio y la generación innecesaria de residuos; por otra parte, sugirió invertir en focos LED para ahorro de energía eléctrica, así como reparar fugas de electricidad y utilizar electrodomésticos que sean eficientes en su consumo de energía.