Tijuana, BC 15 de abril de 2016 (GT).- Por su espíritu de lucha por la justicia ambiental fronteriza y su compromiso por barrios saludables para todos, la Coalición de Salud Ambiental norteamericana (Environmental Health Coalition) reconoció al Consejo Consultivo para el Desarrollo Sustentable de Baja California.
En una ceremonia realizada en San Diego, California, la noche del jueves, Diane Takvorian, directora ejecutiva de esta Coalición entregó al CCDS de Baja California el reconocimiento “2016 One People, Una Frontera Barrios Saludables”, que fue recibido por el presidente del Consejo, José Carmelo Zavala Álvarez.
A decir de la propia Comisión de Salud Ambiental, las comunidades a lo largo de la frontera tienen el privilegio y la gran responsabilidad de transcender fronteras y mezclar dos culturas en una forma de vida única, una frontera compartida, una comunidad en solidaridad y un pueblo unido.
En la opinión del ingeniero José Carmelo Zavala, la Coalición tomó en cuenta la participación que tuvo el CCDS, particularmente la comisión integrada por los consejeros Ignacio Martínez y Rubén Sepúlveda, para darle salida a la controversia y lograr el acuerdo para que los últimos casi 4 kilómetros del Arroyo Alamar se conviertan en un complejo hidroecológico-turístico.
“El proyecto del Alamar estaba un tanto atorado, no se juntaban las partes ni había una mesa, no había un espacio de discusión, el CCDS facilitó y trabajó para que existiera una mesa técnica; se logró que en los últimos 3.7 kilómetros no se pusiera concreto, sino que se retomara el proyecto original hidrológico, más acorde al medio ambiente y ecología de la zona”, recordó.
Tendríamos que pensar que lo local en Tijuana es internacional, agregó Zavala Álvarez, este reconocimiento es una muestra de que la colaboración rebasa las estructuras de gobierno de ambos países y hay una comunidad integrada que rebasa la frontera, porque el tema ambiental ha sido un concepto de vanguardia en muchas áreas, como el derecho a la información y la redefinición de la frontera.
Destacó que el programa Frontera 2020 atiende a una franja de 400 kilómetros, 100 hacia el Norte y 300 hacia el Sur, en donde ambos países se consultan sobre proyectos fronterizos y se da la cooperación no sólo económica, sino mediante las certificaciones verdes de la Comisión para la Cooperación Ecológica Fronteriza.
“Es una buena noticia que, producto de esta cooperación y visión de frontera, en Baja California cambiemos el horario de verano ajustándolo con el de California y no con el del resto del país, ello es una muestra de que se reconoce esta integralidad y esta relación tan estrecha, pero falta aún mucho por construir”, finalizó.