Por : Gilberto LAVENANT
Tijuana BC 22 de diciembre de 2015 (GT).-Como proclaman en las manifestaciones públicas : se ve, se siente, la navidad está presente, pero cada día está más pobre.
El principal medidor de la pobreza en México, es nuestro propio bolsillo. Cuando se acercan fechas tan tradicionales como las decembrinas, que son propicias para reuniones familiares, pero vemos que en los bolsillos no tenemos dinero o el que tenemos, es muy poco. Definitivamente algo anda mal.
Ya no se ven, como en años pasados, las tiendas atiborradas de compradores, buscando conseguir los obsequios de los miembros de la familia. Ya no digan de los amigos. Al menos para hijos, hermanos o parientes cercanos.
Lo mismo pasa con los tradicionales arbolitos de navidad. Naturales o “nevados” artificiales. Casi en plena navidad, aún se ven los lugares de venta de los arbolitos, llenos de estos, menos de compradores.
Está claro que ésta habrá de ser una pobre navidad. Cabe recordar, que en julio pasado, en el informe del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, conocido comúnmente como Coneval, se indicó que en este 2015, en México hay dos millones más de pobres que hace u par de años.
Entonces se dijo que el crecimiento de la población, en condiciones de pobreza, pasó de 53.3 millones de mexicanos en 2012 a 55.3 millones en 2014, lo que representa 46.2% del total nacional. Esa pobreza ya se palpa y es inocultable.
La pobreza extrema, o seas los habitantes que no tienen recursos ni para alimentarse, dicen que disminuyó durante esos dos años, al pasar de 11.5 millones de personas en 2012 a 11.4 millones en 2014, es decir, 95.5 % de los mexicanos viven en condiciones de precariedad extrema.
Y conste, para atender la pobreza en México, se destinaron 850.4 mil millones de pesos en 2013, según el Coneval.
En tanto que el número de mexicanos con ingresos y condiciones adecuadas de bienestar creció en ese mismo período en un millón 400 mil.
Los niveles de pobreza, son cercanos a los reportados en 2010, cuando 46.1 % de los mexicanos vivía en esta condición.
El informe de Coneval, sobre los Resultados de la Medición de Pobreza 2014, indica que en 10 Estados aumentó el número de mexicanos en pobreza y también los que no tienen ni para comer.
La pobreza repuntó en Morelos, Campeche, Veracruz, Oaxaca, Chiapas, Estado de México, Sinaloa, Coahuila, Hidalgo y Baja California Sur.
Aunque en varios Estados bajó la pobreza, en otros, como Oaxaca, Veracruz, Morelos y Estado de México, aumentó. Mexicanos estos que, tratando de encontrar mejores condiciones de vida, emigran a las entidades fronterizas, como Baja California.
En entidades que registraron reducción de pobreza, como Chihuahua, Quintana Roo y Zacatecas, fue de apenas entre 7 mil a 15 mil personas, cuando que donde se registró incremento, fue de 941 mil y 228 mil ciudadanos más, en situaciones de precariedad.,
La medición de la pobreza se hace en cuatro niveles, que van desde la pobreza extrema, moderada, vulnerable por carencias en educación, salud, seguridad social, vivienda y alimentación, además de los vulnerables por ingresos, que están por debajo de la línea de bienestar.
Según el informe, entre 2012 y 2014 la población con niveles superiores a la línea de bienestar, fue de apenas 23.2 millones de personas a 24.6 millones.
Según el Coneval, 2 de cada 10 mexicanos no es pobre y tampoco están en la línea de vulnerabilidad. Ufff, menos mal.
Sin embargo, el 79.5% de la población mexicana vive en condición de pobreza y vulnerabilidad.
Si bien es cierto que en algunas entidades del país, se han reducido las carencias en educación, salud y seguridad social, en la población en pobreza, pero no mejoraron el acceso a la vivienda ni a la alimentación, en tanto que en los dos últimos años, los ingresos de los mexicanos disminuyeron en cuando menos el 3.2%.
Estudios que se han hecho, respecto a las condiciones económicas de los mexicanos, indican que México es uno de los países más desiguales en el mundo, por cuanto hace a ingresos.
De esto se deduce que esta será una navidad pobre. La cena no será especial, No al menos como se acostumbraba en estas fechas.
En algunas casas, no habrá árbol de navidad. En muchas otras, ni regalos.
Ante la ausencia de cosas materiales, hay que valorar la importancia de otras cosas que ya habían sido rebasadas. A falta de dinero, la unión familiar es sumamente valiosa y preciada.
Feliz navidad y próspero año nuevo. Que expresiones como ésta, abrazos y sonrisas, colmen sus hogares en esta pobre navidad.