Tijuana BC 26 de septiembre de 2016 (GT).- A pesar de ello algunos médicos no contemplan encontrar y comprender las causas que provocan en el hombre la baja capacidad para lograr embarazar a su pareja de manera natural o asistida.
De acuerdo con la Dra. Isabela Martínez Robles, directora de Vida Instituto de Reproducción Humana del Noroeste, la infertilidad no es una enfermedad sino un síntoma de alguna o varias entidades que requieren ser detectadas y atendidas de manera puntual, en algunas situaciones incluso para poderla prevenir.
Las enfermedades genéticas representan un 40% de las razones por las que el hombre puede presentar ausencia de espermas o baja cuenta en el análisis de semen, casos donde se recomienda analizar el cariotipo y cromosomas para determinar el probable origen genético.
Se debe considerar que con las nuevas técnicas de reproducción asistida se puede lograr el embarazo, pero sin tener pleno conocimiento de lo que se está transmitiendo a los hijos.
Martínez Robles indicó que un solo examen de semen que muestra bajo conteo de espermatozoides no determina si la persona es infértil o no, ya que los cambios en este generalmente pueden ser inespecíficos, las concentraciones varían por los niveles de estrés, la edad, el ejercicio, alimentación y actividad sexual antes del análisis, etcétera.
Otras razones por las que también se modifica la calidad del semen es por infecciones, inflamación de las venas del escroto por varicocele, traumatismos, tumoraciones, cáncer, aumento de la temperatura en el cuerpo como en el caso de paperas, entre otras.
“Partiendo de que la infertilidad actualmente casi en su totalidad es tratada por gineco-obstetras, el factor masculino es poco comprendido y estudiado, provocando en ocasiones que el análisis de las concentraciones de semen sea suficiente para determinar el uso de formas asistidas de reproducción cuando estas no son necesarias, o que sean utilizadas sin encontrar el motivo de requerirlas”, subrayó.
Por ejemplo, en casos de aborto recurrente se llega a descartar el factor masculino como causante porque tiene conteos normales de espermatozoides, por el contrario a la mujer se le realizan estudios y cirugías pero sigue perdiendo al producto, lo que significa que la investigación e ir más allá de un primer e único estudio no se realizan.
Hay situaciones donde la información genética o bien el ADN del espermatozoide puede estar fragmentado o dañado, esto hace que el embrión interrumpa su desarrollo de manera temprana.
La Directora de Vida Instituto de Reproducción Humana del Noroeste indicó que antes de un procedimiento se debe recurrir a los diversos estudios de valoración que hay tanto para el hombre como para la mujer, ya que las causas de no lograr la gestación son de manera proporcional para ambos, esto eleva considerablemente el éxito de un embarazo inclusive en algunos casos hasta de forma natural.