Por : Gilberto LAVENANT
Tijuana BC 20 de agosto de 2015 (GT).- Para quienes sueñan con la alcaldía de Tijuana o tratan de decifrar el enigma electoral de los comicios del 2016, cabe anticipar que la contienda será entre el priísta René Mendívil y el panista Antonio Valladolid.
Por el lado del priísmo, Mendívil tiene ventaja sobre otros, en cierta forma porque, aparentemente, el excandidato a la gubernatura estatal, Fernando Castro Trenti, de hecho, no de derecho, ni de manera formal, le heredó la dirigencia del castrotrentismo.
Algo irónico, porque el distanciamiento entre ambos personajes, es más que evidente. El propio diputado local se afanó en deslindarse de quien fue su tutor durante tantos años, pues supone que es la única forma de lograr el apoyo del hankismo, que claramente le ha advertido que sin Fernando, todo y que con Fernando, nada.
Sin embargo,a partir de la llegada de Manlio Fabio Beltrones, a la dirigencia nacional del PRI, Mendívil tendrá cuidado de no insistir en deslindarse de Castro Trenti, porque a través de este, conoció al sonorense y tiene el temor fundado de que en cualquier momento el aún embajador de México en Argentina, se integre al equipo de Beltrones y lo bloquee.
La otra ventaja se la da el ser coordinador de la fracción parlamentaria del PRI en la Legislatura Estatal, lo que fortalece la suposición de que es el líder del castrotrentismo. Sin serlo.
El breve plazo que falta para la designación de candidatos priístas, no le daría tiempo a Beltrones para “inventar” a algún otro candidato para la alcaldía de Tijuana, distinto a Mendívil. Así es que no hay duda : la candidatura priísta de Tijuana, será para René. El posible o remoto tiunfo electoral, es otra cosa totalmente distinta.
En donde andan confundidos, es en el ámbito panísta.
La duda surge, porque en el panismo hay dos poderes. El poder de la nómina estatal, en manos del gobernador Kiko Vega. Y el poder de hecho, de la llamada “onda grupera”.
Tres son los aspirantes panistas más fuertes :
El -aún- diputado federal, Juan Manuel Gatélum Buenrostro. Mejor conocido como “El Patas”. Amigo de Kiko.
El Secretario de Finanzas del gobierno estatal, Antonio Valladolid. Socio de Kiko.
El Secretario de Desarrollo Social, Ricardo Magaña. Uno de los principales operadores políticos de Kiko, al tener a su cargo la captación y control de la clientela electoral, a través de los programas de desarrollo social.
Pero ¡no se hagan bolas ! Kiko prioriza los negocios, más que los afectos personales.
Dicho en otras palabras, a Kiko le favorece más que su socio Tony Valladolid sea Alcalde de Tijuana, a que lo sea su amigo “El Patas”. Ya ha trascendido que a su amigo le cumplirá el sueño de tener una notaría pública. En forma personal o a través de su hijo, “El Patitas”.
Además, le garantiza que lo hará Alcalde de Tijuana, al concluir su gestión como gobernador . Las negociaciones con el nuevo dirigente nacional del PAN, le permitirán eso, y más.
Por eso, Tony está tan tranquilo. Está empezando a manejar una campaña mediática, a “cuentagotas”, en tanto llegan los tiempos electorales. Pero ya está listo para el arranque. Pronto convocará a su tradicional “fiesta de cumpleaños”, en la que mostrará toda su fuerza política.
Ciertamente, existe “una mosca en la sopa azul”. Se llama Cuauthémoc Cardona Benavides. Es diputado local. Aspira a la alcaldía de Tijuana, pero es ajeno a la corriente kikista.
Por eso, al Témoc se le observa rebelde. Critica a los propios panistas, y los descalifica, para “sacar tajada” en la contienda. Esa ha sido siempre su treta. Seguramente se disciplinará, cuando le prometan la Sindicatura o una regiduría.
Lamentablemente, para Cuauhtémoc, los aires políticos no le favorecen. Corre el riesgo de sumarse -por primera vez en tantos años- al ejército azul de desempleados.
Por cierto, la expresión : ¡no se hagan bolas! Dicen la fabricó el Presidente Carlos Salinas de Gortari, cuando parecía que el sucesor sería Manuel Camacho Solis, que ¡andaba desatado!, hasta que don Carlos les advirtió : ¡No se hagan bolas, será Luis Donaldo Colosio!
Es muy probable que Kiko Vega siga dejando que los “gallos azules” continúen brincado en el corral y un día, emulando a Salinas, les advierta que “el gallo azul” para Tijuana, será su socio Antonio Valladolid. Los negocios, son primero.
El análisis no pretende afirmar categóricamente quienes ganarán los comicios 2016, sino quienes tienen el control para ello. Al igual que en el 2015, el llamado “voto duro” marcará la pauta para definir los resultados electorales.
Pueden tener la seguridad de que se aplicará aquello de : “dinero, mata carita”.