CARMEN VALERO
Berlín, Alemania 11 de abril de 2016 (elmundo).-Un total de 5835 refugiados menores de edad, entre ellos 555 niños, se encuentran desde el pasado año en paradero desconocido tras haber sido registrados en Alemania, por lo que las autoridades no pueden garantizar que los menores sigan en el país y tampoco excluir que hayan caído en manos del crimen organizado.
Según el Ministerio de Interior, que no esgrime las posibles razones de estas desapariciones, los menores a los que se ha perdido el rastro, proceden en su mayoría de Afganistán, Siria, Eritrea, Marruecos y Argelia.
“Que haya miles de menores desaparecidos en Alemania sin que el Gobierno haya dado todavía la voz de alarma es muy triste”, ha declarado la portavoz del grupo parlamentario de Los Verdes, Luise Amtsberg, tras recibir los datos del Ministerio de Interior a una pregunta de su fracción.
Amtsberg reclamó al Gobierno más decisión en la búsqueda de los menores desaparecidos y evitar que caigan en manos de bandas dedicadas a la prostitución, el tráfico de drogas e incluso de órganos, una amenaza que ya ha sido esgrimida por organizaciones no gubernamentales y parlamentarios europeos.
En total, el pasado año desaparecieron en Alemania tras ser registrados en los distintos centros de acogida de demandantes de asilo y refugio 8.006 menores de edad, de los que 2.171 reaparecieron posteriormente. Un total de 5.835 siguen desaparecidos.
Se trató, en todos los casos, de menores no acompañados, jóvenes y niños que emprendieron rumbo a Alemania con la intención de reunirse con familiares o conocidos, proseguir viaje a otros países o bien de acceder a un estatuto que les permitiera después solicitar reagrupación familiar, derecho que las autoridades alemanas han suspendido en el marco de un paquete de medidas encaminadas a reducir el flujo migratorio.
En Alemania hay actualmente casi 70.000 refugiados menores de edad “no acompañados”, en su mayoría originarios de países del norte de Africa. Salvo en casos muy excepcionales, ninguno de esos menores podrá solicitar la agrupación familiar y posibilitar que viajen sus progenitores, y salvo caso muy excepcionales también podrán ser expulsados de Alemania.