Ensenada BC 15 de septiembre de 2015 (GT).- Molestias como incapacidad para morder y sensibilidad dental son las causas más comunes que provocan las caries, que además son consideradas como uno de los padecimientos más frecuentes entre la población debido a la falta de aseo dental.
El doctor Martín Huerta Valenzuela, estomatólogo del Hospital General de zona (GZ) IV # 8 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Ensenada, explicó que el ácido, los residuos de comida y la saliva se combinan en la boca y forman una sustancia llamada placa bacteriana que se adhiere a los dientes provocando afectaciones severas.
Dijo que la placa que no se elimina de los dientes se convierte en sarro adhiriéndose a los molares posteriores, justo encima de la línea de la encía en todos los dientes y en los bordes de las obturaciones, ésta y el sarro, irritan las encías provocando gingivitis y periodontitis.
Señaló que los ácidos en la placa dañan el esmalte que cubre el diente y crean orificios (caries) que generalmente no duelen, a menos que se tornen muy grandes y afecten los nervios o causen una fractura del diente; sin un tratamiento adecuado ocurre un absceso dental que destruye el interior del diente causando la pérdida.
Huerta Valenzuela dijo que la caries provoca dolor de muelas, sensación dolorosa en los dientes, absceso dental, fracturas, molestias o dolor sobre todo después de consumir bebidas o alimentos dulces, fríos, calientes, ocasionando hoyuelos y agujeros visibles.
En ese sentido, destacó que el tratamiento ayuda a impedir la pérdida de la pieza con la colocación de coronas y tratamientos de conductos; se obturan los dientes, reemplazando la afectación con material de plata, oro, porcelana o resina compuesta.
Un tratamiento de conductos se recomienda si el nervio del diente muere como consecuencia de una o varias caries y de una lesión, se extrae el centro del diente incluido el nervio y el tejido vascular junto con las caries y las raíces, se rellena el espacio con un material sellante.
Por ello exhortó a los derechohabientes para que acudan cada seis meses a una limpieza de rutina para prevenir la caries, cepillarse con flúor por lo menos dos veces al día y usar la seda dental al menos una vez, evitar el consumo de bebidas azucaradas o chupar caramelos y mentas de forma constante.