Tijuana BC 17 a de junio de 2015 (GT).- A dos meses del “mega” operativo federal en el que clausuraron el bar Madonas y arrestaron a cuatro personas, entre ellos el dueño del establecimiento y su hijo, acusados por delitos de trata, en la actualidad todos salieron del Cereso de La Mesa, aunque Galor Shaltiel (propietario) permanece en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración, en espera de que un Juez resuelva si lo deja permanecer en territorio mexicano o es expulsado, como le sucedió a su vástago.
Información obtenida por guardiantijuana.info arrojó que después de aquel impresionante operativo encabezado por personal de la Unidad Especializada en Investigación de Tráfico de Menores, Personas y Órganos, el cual duró más de 12 horas, Shaltiel, su hijo y dos personas más habían sido arrestados y puestos a disposición de un Juez Federal.
En un inicio se indicó que por lo menos Shaltiel habría sido trasladado a la Ciudad de México, situación que no ocurrió, pero si fue internado, junto con los otros detenidos en la Penitenciaria de La Mesa; después de varios procedimientos de sus abogados lograron que el juzgador encargado del caso les fijara fianza, la cual osciló entre los 80 y 300 mil pesos. Uno a uno recuperó su libertad, aunque en el caso del hijo del empresario Israelí, fue puesto a disposición del INM y trasladado a la capital para ser expulsado del país.
Mismo procedimiento tenían preparado para Galor, pero éste de una manera por demás “rara” logró un amparo federal para evitar ser expulsado, aún y cuando estaba preso, pero lo que más sorprendió a litigantes consultados es cómo le otorgaron este beneficio después de que enfrentó un proceso penal grave.
Por lo anterior, se confirmó que el propietario del bar en el que realizaban eventos de sadomasoquismo “extremo” permanece, desde el instante que salió del penal, en las instalaciones del INM de esta ciudad, en espera de que un Juez decida si lo dejará permanecer o no en el municipio.
La madrugada del sábado 25 de abril, agentes de la Gendarmería Nacional se colocaron a lo largo y ancho de la calle 4ª, entre las avenidas Revolución y Constitución, en donde permanecieron durante todo el día mientras otros agentes federales entraba y salían, pidiendo identificaciones a las trabajadoras. Al final se retiraron con los resultados ya descritos, y en las entradas del centro nocturno sólo quedaron los sellos de “bien asegurado”, así como unos cuantos uniformados durante unos días más.
Poco tiempo después del movimiento policíaco, guardiantijuana.info tuvo acceso al Facebook de Galor Shantiel y dio a conocer diversas fotos en las que se veían mujeres encadenadas, y el conviviendo con otras jóvenes, lo que provocó que en un par de horas la cuenta de esa red social fuera cerrada.
