Tijuana BC 4 de julio de 2016 (GT).- Un grupo de 22 estudiantes de octavo semestre de la carrera de Arquitectura de la Universidad Iberoamericana de la Ciudad de México, visitaron Tijuana para cursar una materia de verano en “La Granja Transfronteriza” de Camino Verde, para crear una propuesta de mejora de los proyectos a favor de la comunidad de esa zona.
Raúl Cárdenas, fundador del colectivo Torolab y creador de La Granja, explicó que durante más de un mes los jóvenes trabajaron el proyecto en dos etapas, la primera desde la Cuidad de México donde estuvieron en comunicación con Tijuana y en la segunda etapa ya convivieron con la comunidad y estudiaron el territorio.
Lo anterior con el fin de generar una propuesta arquitectónica que respondiera al contexto y complementara el macro-proyecto que “La Granja” desarrolla desde 2010, cuyo objetivo es ayudar a combatir la pobreza y prevenir la violencia por medio del arte, la cultura, la capacitación, el intercambio, el desarrollo e investigación de ciencia/tecnología.
Precisó que también es un modelo de forestación y de huertos urbanos, que a su vez genera modelos económicos que empoderen a los habitantes para la transformación social y territorial de su comunidad.
El también catedrático refirió que es la tercera ocasión que “La Granja Transfronteriza” es motivo y sede de viajes de estudio, pues hace un par de años recibió a estudiantes de la Universidad de Rennes, Francia que trabajaron durante el verano en la comunidad de Camino Verde.
El pasado jueves 30 de junio los estudiantes de la Ibero presentaron ante Raúl Cárdenas y los los profesores de la Ibero CDMX, el Mtro. Juan Carlos Tello y el Mtro. Alejandro Hernandez, director editorial de la revista Arquine, especializada en arquitectura y arte los proyectos desarrollados durante el taller.
El Arq. Raúl Cárdenas comentó que dichos proyectos buscan complementar y potenciar el programa actual, a través de propiciar las condiciones necesarias para generar espacios de experimentación, aprendizaje y esparcimiento, donde por medio de una serie de talleres y actividades orientadas al cultivo de hortalizas y preparación de alimentos derivados de éstas se logren dos objetivos principales.
Por un lado, agregó, la transformación del espacio exterior de “La Granja” en un huerto productivo abierto a la comunidad donde se gesten dinámicas de convivencia sanas entre las personas y se recupere el sentido de comunidad; y por otro difundir el conocimiento para lograr replicar el modelo en otros espacios, familiares y colectivos, con el fin de alcanzar la autonomía alimentaria en Camino Verde.