Tijuana BC 28 de agosto de 2015 (GT).- “Esta enfermedad puede afectar desde recién nacidos hasta a personas de la tercera edad, sin predominar en un grupo específico de la población, y aunque no es prevenible, es importante atenderla en las fases tempranas”.
El neurólogo del Hospital General de Tijuana, Doctor Juan Barrera Pacheco, informó que la parálisis facial periférica, mejor conocida como parálisis de Bell, es una enfermedad que se caracteriza por la manifestación de una afección en el nervio facial, afectando los músculos de la gesticulación de un lado de la cara.
Señaló que este padecimiento se presenta posterior a una infección, principalmente de tipo viral, la cual puede cursar de forma asintomática para después manifestarse la parálisis. Y que se encuentra asociada a la exposición a los cambios climáticos como a niveles de estrés.
En cuanto a los síntomas, el neurólogo mencionó que se pueden presentar en el transcurso de días hasta una semana, iniciando con dolor a nivel del oído (en el lado afectado), pérdida del gusto en la mitad de la lengua, y posteriormente imposibilidad para cerrar el ojo, desviación de la comisura labial hacia el lado sano.
Para realizar el diagnóstico, el especialista precisó que se debe realizar una exploración clínica, en la cual se puede observar que el paciente encuentra imposibilidad para elevar la ceja, arrugar la frente, cerrar el párpado del lado afectado, presenta desviación de la comisura labial hacia el lado sano, sensación de inflamación y no puede chiflar o silbar.
Respecto al tratamiento, Barrera Pacheco señaló que en la mayoría de los casos la enfermedad se autolimita e inicia su mejoría entre la primera y segunda semana, llegando a la normalidad entre los dos y tres meses, y en caso de ser necesario se ofrece terapia física.
Precisó que sólo un grupo pequeño de pacientes con parálisis facial quedan con secuelas que le evita tener una gesticulación completa.